jueves, 5 de marzo de 2009

Google SA, agencia de publicidad

El primer buscador de Internet ha trastocado también el sector de las empresas de comunicación de todo el mundo.


"Creímos que Google sólo iba a ser la biblioteca de Alejandría del nuevo siglo; luego vimos que hacía de intermediario de las agencias online. Ahora compite con las agencias convencionales". Luis Casadevall, mejor creativo del siglo según anunciantes y publicistas, resume entre estupefacto y entusiasmado, el panorama mundial de la publicidad.

El siglo XXI alumbró, en medio de la crisis de laspuntocom, Adwords, la herramienta del entonces inmaculado Google para introducir publicidad junto con las búsquedas. Nueve años después, Google ingresó por ese concepto 21.000 millones de dólares, más que cualquier multinacional de la publicidad. Su peso crece proporcionalmente al número de internautas. "¿Qué futuro tiene la agencia convencional ante la audacia, la innovación y la ambición de Google?", se pregunta Casadevall. La catarsis de la música, del cine, del periodismo, se sigue extendiendo a otros sectores.Servicios de buscadores a medida para empresas...servicios premium de correo...picasas...Google Earth, pero de cada 100 dólares que entran en la caja de Google, 97 son por la publicidad. Su dependencia ha bajado sólo dos puntos en ocho años.

De los 21.795 millones de dólares ingresados en 2008, el 69% fueron con AdWords, anuncios insertados en los resultados del buscador. "La publicidad textual y relacional es las más efectiva en Internet", dice Jaime García, analista tecnológico de IDC. "A parte de no alterar el orden de búsqueda, la publicidad en Google es menos invasiva y manipuladora que en otros buscadores".

Al margen de que el público agradezca más o menos este tipo de anuncios, hay otra característica fundamental, "el anunciante sólo paga cuando se entra en su página", señala Pere Rovira del medidor de audiencias WebAnalytics. "El pago por clic es una ventaja respecto a otros modelos publicitarios que exigen que el anunciante pague por la mera inserción".

lunes, 2 de marzo de 2009

LA IMPORTANCIA DEL POLIÉSTER


El patrimonio fílmico puede ser afectado por varios factores. Los más graves tienen que ver con la naturaleza fisicoquímica de los soportes cinematográficos.

Hasta 1951 se utilizaba como el material base para los negativos de filmación el nitrato de celulosa, altamente inflamable y de rápida descomposición, lo que obligó a utilizar un nuevo soporte de acetato de celulosa y a recopilar toda la producción fílmica anterior a ese año. Sin embargo, en la década de los sesenta se descubrió que este material se descomponía aún más rápido que el anterior y por esta razón se implementó el uso de un soporte hecho en poliéster, que sigue siendo utilizado en la actualidad por su seguridad. Su estabilidad es alta, aún usado en las condiciones más adversas y tiene un índice de longevidad cinco veces mayor que el triacetato de celulosa con una expectativa de vida de 500 años, por ello frecuentemente se utiliza con fines de archivo.

Fue la compañía Kodak quien introdujo, en los años 80, la película con base de poliéster. Esta era mucho más resistente y segura que la de sus antecesores. El poliéster es un plástico muy resistente y no es reciclable. Absorbe mucho menos agua que los acetatos y nitratos por lo cual es más estable. En su fabricación no se utilizan solventes, sino que se derriten "perlas" del polímero sintético a altas temperaturas. Pero una vez que el poliéster se rompe no se puede empalmar satisfactoriamente con los pegamentos comerciales para película disponibles. Estas películas se empalman con una empalmadora de cinta o con una empalmadota que utiliza el calentamiento inductivo o ultrasónico para derretir o fundir los extremos de la película.

Dentro de este material hay diferentes tipos de formatos. Los más utilizados son 8 mm (fuera de uso excepto por estudiantes y nuevos artistas que quieren recuperar el formato Super 8), 16mm (formato para aficionados), 35mm (formato profesional) y 70 mm (IMAX). Este último suele ser muy caro debido al proceso de fabricación y revelado. Para la proyección en las salas de cine, se utiliza película positiva (Reversal film) de 35mm.

Es por todo esto que el poliéster se ha convertido en una apuesta segura en la utilización de material audiovisual, así como el mejor soporte para la conserva a largo plazo de los archivos audiovisuales.